La historia a través de las voces de fundadores y pioneros

El 7 de mayo de 1996 nuestra ciudad cumplió sus primeros cincuenta años de existencia. Unos meses antes de esa fecha se organizó una comisión con el objetivo de llevar a cabo diversas acciones tendientes a celebrar el grato acontecimiento.

La Comisión Cincuentenario, formada por hijos y nietos de pioneros y con el auspicio de la Dirección de Cultura Municipal, realizó diversas actividades con el objetivo de destacar el legado de los impulsores del proyecto fundador como así también de los primeros pobladores que se radicaron en Jardín y contribuyeron con su labor cotidiana al progreso de la localidad.

Integraban aquella comisión: presidente Ángel Esteban “Papi” Villaverde, vicepresidente Florinda Acuña, secretaria Teresa Beatriz “Bety” Silveira, tesorera Hayde “Medy” Beulke, protesorera Mary Acuña, prensa y difusión Ignacio Arrieta, vocales Raúl “Nene” Hein, Julia Ponce y Elba Ester “Beba” Silveira.

Las múltiples acciones realizadas comenzaron el 18 de febrero de 1996, festejando los 100 años de vida de don Miguel Romer, el agrimensor que con machete, teodolito y unos pocos asistentes, en 1946 internándose en el monte hizo la mensura y el trazado inicial del pueblo que hasta entonces solo existía en los planos.

El gran evento del aniversario fue realizado el 7 de mayo a través de una fiesta popular que además de la visita de autoridades provinciales para los actos protocolares se destacó con la participación de los distintos barrios que componen la ciudad, mancomunados en los festejos durante todo aquel soleado día.

En esa misma jornada se inauguró, en cercanías de la terminal de ómnibus, un monumento en el que se plasmó el diseño que se había utilizado como escudo del cincuentenario. Creación del diseñador y dibujante Mario Arrieta, la simbología del conjunto es la siguiente:

Sobre un artístico número 50 que ocupa gran parte del campo, la silueta del hombre, figura central y principal. Con sombrero de paja para protegerse del tórrido sol veraniego, lanza un montaraz sapucay a la distancia. Vencedor del monte, manifiesta su triunfo a través del grito.

El pueblo incipiente está simbolizado por un sol que se asoma en la parte superior del fondo, cual un caserío que pretende ser ciudad.

Al frente los dos elementos que fueron básicos y fundamentales: el machete y el hacha, únicas herramientas con que contaban los primeros hombres que hollaron el monte virgen a través de tacuapizales, yuqueríes y arboles imponentes que tornaban ímproba la tarea de abrir picadas para marcar con más de seis mil mojones una superficie de igual cantidad de hectáreas.

Además de todos aquellos eventos que aún perduran en la memoria de sus participantes, y del monumento conmemorativo que se yergue a un costado de la ruta, hubo otro legado fruto de aquellos meses de trabajo y de festejos.

Desde marzo a mayo de 1996, tres veces por semana se emitió un programa radial que llevó el nombre de “La Hora de Jardín América”. El espacio fue gentilmente cedido por Radio Odisea, y contó con la conducción desinteresada de Juan Antonio “Coco” Vivas. El equipo se completaba con Roberto Acuña e Ignacio Arrieta.

Los protagonistas principales de cada audición eran fundadores y pioneros, que a lo largo de esos meses fueron invitados para contar acerca del Jardín América de antaño. Quedaron para la posteridad sus voces y relatos acerca de los primeros años de nuestra querida ciudad.

El material de aquellos programas quedó grabado en 22 casetes de una hora de duración cada uno, los que estuvieron archivados por casi dos décadas. Con el avance de la tecnología, se hacía imperiosa su conversión a un formato más nuevo, ya que cada vez son menos los equipos de audio que cuentan con una casetera.

Entonces, como parte del presente proyecto, se llevó adelante la tarea de preservar dicho material de valor histórico. Fueron largas horas digitalizando cada una de esas cintas, mejorándoles el sonido y ajustando por medios informáticos la calidad de las grabaciones.

Con el audio ya en formato digital, el siguiente paso fue comenzar el trabajo de transcribir esas entrevistas. Dicha tarea resultó bastante compleja debido a que la intención no era realizar una transcripción textual, sino agregarle información del contexto para profundizar sobre los temas tratados por cada entrevistado.

Sin embargo, con el paso de los años muchos de aquellos entrevistados ya han fallecido, y la tarea de complementar los datos e historias que contaron se hizo muy difícil. Queda como proyecto pendiente llevar a cabo esas transcripciones.

Se proyectó incluir el audio de los programas por medio de un CD o DVD que acompañe al libro, pero por cuestiones técnicas y logísticas tampoco se trata de una cuestión sencilla.

Debido a la extensión de cada programa, si se quisiera incluir el material en formato de CD de audio –compatible con cualquier equipo de sonido–, harían falta nada menos que 22 de esos discos. Si se buscara disminuir la cantidad de compactos, se podría intentar con otra tecnología de mayor capacidad por disco, e incluir todo el material en dos CDs de datos con el audio en formato mp3. Sin embargo, además de la complejidad logística necesaria para distribuir los discos junto al libro, éstos no serían tan versátiles ya que sólo podrían ser escuchados en equipos reproductores compatibles con la tecnología mp3 o computadoras.

Como la intención es que el material esté disponible para todo aquel que quiera revivir las palabras de esos antiguos pobladores, se decidió entonces publicarlo a través de Internet.

En los enlaces siguientes se incluye la transcripción de dos de esas entrevistas, las realizadas a José Méndez Huerta y a Eduardo Otto. Se invita a los lectores a escuchar el material restante y revivir las historias y anécdotas de aquellos fundadores y vecinos que amablemente contaron sus vivencias

Escuchar los programas:

Eduardo Otto


  • programa 04
    lunes 18/03/1996
  • programa 05
    miércoles 20/03/1996

Ruperto Araujo


  • programa 08
    miércoles 27/03/1996
  • programa 09
    viernes 29/03/1996